¿Qué es el Product Placement y Por qué Ves Anuncios sin que te des Cuenta?
En este canal me he referido en varias ocasiones al Product Placement, esta
es la ocasión para hablar de ello. ¿Qué es? ¿Para qué sirve?
El emplazamiento por publicidad, posicionamiento de producto o simplemente
Product Placement lo hemos visto centenares de veces tanto en televisión como
en el cine. No, es más, ni menos, que la introducción de una marca, producto o
servicio en la narrativa audiovisual. Por lo cual, es una táctica publicitaria
para posicionar una compañía. En muchas ocasiones es un branding subliminal.
Las empresas financian los proyectos audiovisuales y como compensación de
su patrocinio, su marca es visto por todos los espectadores de forma positiva.
¿Qué en tu película necesitas usar coches? No hay problema, los personajes
utilizan la mejor marca de lujo, que siempre va llegar a su destino, no se va
detener o tendrá desperfectos. Claro, eso no te lo dirán de forma explícita,
porque entonces sería un anuncio, pero si hay que diferenciar que hay distintas
formas de product placement.
En la forma activa, se hará mención directa de la marca en cuestión, se
interactúa con ella o se habla directamente al espectador de los beneficios de
esta. Esta es la forma más vulgar, la que es prácticamente propaganda. Aunque
dependiendo de los directores o guionistas que sepan aprovechar este recurso,
funciona muy bien como elemento para romper la cuarta pared o generar momentos
hilarantes. Por lo que esta manera resulta muy recurrente en comedias que
aprovechan esta dinámica.
La forma pasiva es la menos intrusiva en el arco argumentativo. Ya sabes,
elementos que cumplen una función en su mayoría decorativa. Los que logran
aprovechar el patrocinio sin comprometer mucho su historia como por ejemplo las
tazas de Starbucks en el Club de La Lucha otros simplemente desentonan como en
Naufrago.
Las formas de emplazamiento a su vez se pueden dividir en subcategorías.
Las compañías prefieren más emplazamientos en que se exprese verbalmente el
favoritismo hacia su marca, no obstante, hay otras formas de publicidad
beneficiosa, como la exclusividad o estatus del producto en mención sin tener
que decirlo como aparatos tecnológicos como el reloj de un super espía.
Reforzando el argumento de que es un producto exclusivo, vistoso, confiable y
de alta calidad, sin tener que decir, una sola palabra.
El producto placement viene implementándose prácticamente desde los inicios
del cine y la televisión. En televisión, que emigro de la radio, muy comúnmente
en las novelas, donde se destaca algún producto del hogar que facilita la vida
de los personajes. Se vino a popularizar en los 80s. Gracias a que Steven
Spielberg logro que una compañía de dulces incrementara sus ventas en un 80% en
el 82, tras su aparición en ET El Extraterrestre.
En contra medida para no promocionar marcas y la desconfianza en los
patrocinios. Se generó el sistema de realidad ACME. El cual consiste en la
implementación de marcas ficticias. Ya sabes. La misma marca de los Looney
Tunes, otro ejemplo sería la cerveza Duff de Los Simpsons. La implementación de
marcas ficticias no solo se emplea por el no patrocinio, sino también para
evitar demandas, en caso de expresar connotaciones negativas sobre un producto
en particular.
Por ejemplo, la canción de Aqua, Barbie Girl fue demandada por la compañía
de la muñeca. El fallo favoreció a la banda cuya canción satiriza dicho
personaje y por contradictorio que suene, por eso en la película live action se
escucha un remix de la misma, debido a la popularidad de la canción.
El product placement es una apuesta entre partes. Quienes financian una
producción que puede fracasar en taquilla, número de espectadores alcanzados o
que la presencia de la marca pase desapercibida, tenga poca aparición o su
valor no se destaque. La otra parte, aunque recibe financiamiento sin asumir
muchos riesgos económicos, ve comprometida su libertad creativa y el rechazo de
los espectadores por su aversión la publicidad o una marca en particular.
Hay emplazamiento de la marca que resulta antinatural o contradictorio a
hechos históricos. Sino pregúntenle a la “accidental” taza de café en juego de
tronos.
El documental de Morgan Spurlock “La historia más grande jamás vendida”
explica mejor toda la implicación del product placement. Ya que su misma cinta,
se financió a base de esta, lleva nombre de marca con mayor patrocinio en el
título y el guion gira en torno a al branding. De hecho, como dato curioso,
este documental tiene el récord Guinness en cantidad de product placement.
A mi ninguna marca me patrocina, por lo cual, no he hecho alusión directa a
una compañía en particular, aunque haga presencia en pantalla, es de forma
didáctica.
Espero la información haya terminado de aclarar el concepto y que les permita tener otra perspectiva a la hora de ver cualquier contenido. Por mucho que un personaje disfrute de algún producto o servicio, no necesariamente sea lo indicado para ti. Déjenme saber en los comentarios, cuales han sido los product placement más descarados que han visto. Yo me quedo con Evolution de 2001 donde literalmente salvan al mundo gracias a un Shampoo, la película tiene más de 20 años y me acuerdo más del nombre de la marca que el argumento de la película o los protagonistas.
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