Reseña Taxi Driver (Cine Clásico)
Travis Bickle
interpretado por Robert De Niro es un ex marine con trastorno del sueño. Decide
pasar los días y las noches como conductor de Taxi para tener la mente ocupada
y ganar algo de dinero. Sin amigos o familia, Travis deambula por los sectores
más oscuros de Nueva York, absorbidos por la violencia, la prostitución y
diversos problemas sociales. Solo hay dos cosas que distraen la mente de
Travis, el cine porno y la atractiva Betsy, interpretada por Cybill Shepherd, una
voluntaria de la campaña presidencial de los Estados Unidos.
Así arranca
la película de culto de Martin Scorsese, una de sus mejores películas y del
cine. Una cinta que refleja lo que no muchos directores se ofrece a presentar,
un lado oscuro de las ciudades, donde hay más suciedad que sociedad.
De verdad no
me siento digno a la hora de hablar sobre esta cinta, pero la pasión por este
arte me motiva a hacer el intento de contar por qué es tan buena la cinta. Básicamente
es una película que puede barrer cualquier premiación de la academia, pero que irónicamente,
¡no se lleva ninguno! (A excepción de Cannes)
Los personajes son interpretados magistralmente sobre todo por Robert De Niro y
una muy joven Jodie Foster con tan solo 13 años. De Niro nos lleva a un personaje que nos
cuenta a través de su diario, los problemas por las que pasa: la soledad, la
crisis existencial, la locura, la indignación, etc. Nos regala además de la
simpatía por su personaje, una de las escenas improvisadas más memorables del
cine: -“¿Me estás hablando a mí?” Inclusive el director nos regala, no uno,
sino dos cameos en la pantalla, siendo el primero el más relevante para la
trama, donde la violencia, parece ser la conclusión para resolver los
problemas.
Habrá gente
que dirá que es una cinta sobrevalorada o que no entiende el por qué es tan
buena; siendo una era de películas blockbuster, puede llegar a ser
comprensible. Esta es una película que se aleja de todo cliché, es además un
referente al cine negro. Las transiciones, los diálogos, la voz en off, la
fotografía, la música, en fin, prácticamente todo en caja de maravilla como una
obra maestra. El tema es envolvente, no estás viendo un protagonista de otro
mundo, ¡es un taxista! La fotografía te hace sentir dentro del taxi, la música se
transforma de alguna manera en el latido del corazón, el desarrollo de la trama
es evolutivo, no arranca frenéticamente ni termina de dicha manera, se da su
tiempo para contarnos la historia sin hacerla lenta, un mérito total del
director.
El guion es
una denuncia a la sociedad en la que vivimos, los policías no sirven de nada,
los políticos solo prometen, la sociedad es continuamente decadente; recurre a
los vicios y a las mujeres como forma de entretenimiento. Este es el tipo de
ambiente que de alguna manera corrompe al protagonista, llevándolo a
situaciones que en un sano juicio nadie nunca haría.
En fin, dirás
que le estoy echando muchas flores a la película o que quizás vi otra que tu
no, sin embargo, esta es una película que debes ver, seas cinéfilo o no, es una
obra que no puedes perderte.
Hay miles de
reseñas o críticas de Taxi Driver, hasta mil veces mejor que esta, puedes ir a
leerlas, si buscas otra opinión más acertada. Lo que no encontrarás, es una
votación representativa de forma negativa al film. Te dejo una cita del crítico
Mick LaSalle que a mi parecer resume la película:
“It's a bizarre success story about how a sick young
man finds his place in an equally sick world.”
Una extraña y
triunfadora historia sobre un joven enfermo que encuentra su sitio en un mundo
igualmente enfermo.
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